Toda protección es poca
El Instituto FIA ya ha probado un bastidor tubular de titanio que parapeta el casco del piloto en caso de un fuerte impacto delantero. La simulación se ha llevado a cabo lanzando, mediante un cañón de nitrógeno, una rueda completa de 20 kilogramos a 225 kilómetros por hora contra el bastidor construido por Lotus F1 Team, que aguantó perfectamente el impacto y protegió el casco situado detrás.
El Instituto FIA ya había probado otras soluciones, como unparabrisas de policarbonato, pero la solución del bastidor tubular ha dado mejores resultados, protegiendo más al piloto, según las pruebas. Andy Mellor, asesor técnico del Instituto FIA, asegura a la revista IQ: "El bastidor básicamente funcionó muy bien. Fue capaz de resistir una rueda y lanzarla lejos de la cabeza del piloto. También probamos disparando la rueda hacia abajo del centro del coche, y también en ángulo", asegura orgulloso de los resultados.